Once días después de finalizar el Torneo de Mar del Plata de 1959, Fischer comenzaría otro evento en Santiago de Chile en memoria del que fuera Presidente de su República entre 1920 y 1925 y entre 1932 y 1938.
Tras batir en la primera ronda al cinco veces campeón colombiano Luis Augusto Sánchez Montenegro y en la segunda al siete veces campeón brasileño Joäo de Souza Mendes; en ambos casos tras duras partidas, Bobby Fischer se enfrentó en la tercera jornada al siempre peligroso GM yugoslavo Borislav Ivkov. El tablero ardió y Fischer fue derrotado en gran estilo!.
No recuperado de aquel trance, Bobby no se contentaría con el empate en la ronda siguente frente al entonces dos veces campeón argentino, Raúl Sanguinetti y terminaría siendo también derrotado (!?).
Ante el cariz dramático que había tomado las cosas, a Fischer no le quedó más remedio que comenzar de nuevo con sus aspiraciones de ganar muchas partidas y por ello rindió cuentas ante el que era actual campeón chileno, Moisés Stekel, al que vencería en 35 hermosas jugadas.
Lo que siguió inmediatamente después es lo que vamos a ver ahora.
Su partida de la sexta ronda ante el fortísimo jugador checoslovaco, Ludek Pachman, que luego sería un reputado teórico del ajedrez y también un prolijo escritor de grandes y metódicos libros de enseñanza.
La foto de aquella partida, apenas conocida por la afición mundial, sigue a continuación:
Fischer no estaba nada contento con su resultado de +3 -2 =0 y quería a toda costa vengarse ante Pachman y de nuevo, pese a los intentos, no lo consiguió y entonces llegó la ¡tragedia!.
Angel Jiménez Arteaga
http://www.ajedreztenerife.com
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